ARTICULO NUEVO DE AUTOR INVITADO, SOBRE UN MAL MUY DIFUNDIDO EN NUESTRA IGLESIA, EL ESPEJISMO DE CREER QUE LAS APARIENCIAS LO SON TODO.

(El presente artículo ha sido publicado sin edición alguna y conforme a su original).

Las apariencias engañan.

“.....que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a estos evita” 2° Timoteo 3:5


Resulta muy relevante tener la capacidad de Dios para relacionar aspectos de la vida cotidiana con la vida del Espíritu (una forma muy utilizada por nuestro Señor) y la Palabra de Dios, y así tener la instancia de reflexionar y considerar cual es nuestra posición y visión frente a los temas que de una o otra forma se nos plantean. En la vida del trabajo existe una expresión popular que dice: Toda escoba nueva, barre bien”, aludiendo a aquellos que recién se están integrando a una tarea o trabajo especifico, queriendo manifestarle a los demás que no se dejen llevar o impresionar por las apariencias, todo esto debido a que estas personas cumplen estrictamente los horarios, no faltan al trabajo presentando cualquier excusa, etc. Debo dar gracias a Dios que hoy tenemos la unción del Espíritu Santo, que nos da una forma muy especial de ver las cosas que ocurren a nuestro alrededor y así evitar consideraciones antojadizas y parciales, ya que al parecer existe una sola forma de ver los acontecimientos: “y es nuestra propia percepción de mirarlos y según el “modelo” establecido e impuesto por nuestro y entorno, y llegamos a pensar que cualquiera que tenga una visión o forma distinta de ver las cosas esta fuera de las normas.
No nos podemos olvidar que la Biblia, que es la base sustentadora de nuestra fe, tiene un caso muy particular y que nos puede colaborar bastante en el análisis del tema que nos ocupa esta vez, cabe señalar que frente a cada tema o situación que ocurre existe una o tantas interpretaciones de acuerdo a las personas que la están viendo o están involucradas en ella; Recordemos que Jehová Dios envía al profeta Samuel a la casa de Isai, a buscar al rey que sucedería a Saúl en el trono de Israel, y es así como comienzan a presentarse ante el vidente de Dios los hijos de Isai, y el primero en hacerlo es Eliab, y dice así el escrito sagrado: “Y aconteció que cuando ellos vinieron, el vio a Eliab, y dijo: De cierto delante de Jehová esta su ungido”, pero la respuesta divina no se hizo esperar, “Y Jehová respondió a Samuel: No mires a su parecer, ni lo grande de su estatura, por que yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que esta delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón” 1° Samuel 16:6-7. Cual habrá sido la impresión o sorpresa que tendría el profeta en ese momento, que para mi en lo personal es uno de los mas grandes hombres que consigna la palabra de Dios por su condición de estadista, profeta, y legislador, ya que el estaba mirando con los ojos del cuerpo y no según Dios, así podríamos seguir enumerando hechos, casos, ejemplos, e incluso en los días en que nuestro Señor anduvo en la tierra se encontró con varios que quisieron APARENTAR algo distinto o diferente de lo que verdaderamente estaban manifestando o sintiendo. Recordemos aquella ocasión cuando llego aquella mujer adonde estaba el Maestro y ungió sus pies con un costosísimo perfume de nardo puro y los enjugo (seco) con sus cabellos (San Juan 12:3) y uno de sus discípulos dijo: “¿Por que no fue este perfume vendido por trescientos denarios1, y dado a los pobres?” San Juan 12:5, cualquiera que lo hubiese escuchado proferir estas palabras habría pensado que preocupación mas grande tenia Judas por los pobres de esta sociedad, pero que dice el autor sagrado: “Pero dijo esto, no porque se cuidara de los pobres, sino porque era ladrón, y teniendo la bolsa, sustraía de lo que se echaba en ella” San Juan 12:6. Aquí tenemos un claro ejemplo de la actuación de Dios y cual es la de los hombres, ¿Acaso no sabia Cristo que Judas era ladrón? Sin embargo le entrego la custodia de la bolsa, y Judas estaba aparentando una “preocupación” que verdaderamente no sentía en su corazón, sino solo estaba pensando en la posibilidad de seguir robando, y así podemos seguir enumerando mas y mas casos, como por ejemplo cuando Moisés quiso separar a los hebreos que reñían mientras estaban en Egipto y uno de ellos le dijo: “¿Quien te a puesto a ti por príncipe y juez sobre nosotros? ¿Piensas matarme como mataste al egipcio? Éxodo 2:14. Claro sin duda Moisés hasta ese momento estaba viviendo en una aparente calma pensando que su delito no había sido descubierto, pero la realidad decía algo muy diferente, ya que después de este incidente tuvo que huir de Egipto, porque Faraón quería matarle y vengar al egipcio muerto.

Que podemos agregar después de todo lo señalado anteriormente, estaremos viviendo, juzgando y actuando movido por las apariencias, ya que estas nos pueden engañar, cuando sabemos de antemano que Dios conoce todas nuestras intenciones y El analiza lo que hay dentro del corazón de todo ser humano, pero también hay hechos dignos de destacar por hacer lo contrario a lo que estamos tratando en este articulo; Veamos el ejemplo del profeta Daniel traído cautivo a Babilonia por Nabucodonosor junto a otros muchachos del linaje real, quien ordeno alimentarlo con la comida del rey, pero...el no queriendo contaminarse pidió solo legumbres para comer y agua para beber, y después de diez días el aspecto o apariencia de ellos resulto mejor que los demás muchachos, ¿Y cual fue el resultado? Dios les dio conocimiento e inteligencia en todas las letras y ciencias; y Daniel tuvo entendimiento en toda visión y sueños (Daniel 1:3,8,17), sin duda que estos jóvenes podrían haberse dejado llevar por las apariencias o el esplendor de los castillos de la gran Babilonia, con sus jardines colgante que hasta el día de hoy son considerados una de las maravillas del mundo antiguo pero no, ellos tenían claro quien era su Dios y encontramos a Daniel siendo ya mayor tentado una vez mas, cuando el rey Beltsasar vio la mano que escribía en la pared y ofreció llenar de glorias y tesoros a quien pudiera decirle lo que allí estaba escrito, pero nadie pudo dar la interpretación sino solo Daniel, pero veamos la respuesta del profeta a la propuesta del rey: “...Tus dones sean para ti, y da recompensas a otros. Leeré la escritura al rey y daré la interpretación” Daniel 5:17. El no estaba por los tesoros y glorias de este mundo, había vivido toda una vida en santa y piadosa manera y no iba a transar al final de sus días, además bien sabia él que la honra y la gloria le pertenecen a Dios y los dones divinos no son para comercializarlos o hacer ganancia personal de ellos.
Y que diremos de nosotros, andaremos mas preocupados de la gloria terrenal y la grandeza económica o estaremos viviendo una vida de aparente piedad, mostrándonos como santos en medios de los hijos de Dios y cuando nadie nos ve o nadie nos conoce somos diferentes, bien sabia el apóstol Pablo que esto podía ocurrir en la congregación de los justos y por eso exhorta al joven pastor Timoteo a “evitar” a todos aquellos que tuvieran apariencia de piedad pero que con sus hechos y actos negarían la eficacia de ella, por lo cual es necesario y urgente pedir al Dios de toda dadiva y don perfecto, que nos dote de ese maravilloso don del discernimiento para así poder juzgar como nos enseña la palabra de Dios en San Juan 7:24, “No juzguéis según las apariencias, sino juzgad con justo juicio”, porque algunos están mas preocupados de la forma de vestir, que el “moño”, que la manga larga, que los bigotes, y tantos etc. como se vengan a la cabeza y no de lo que es esencial, que es agradar a Dios con toda su cuerpo, alma, y espíritu. No nos engañemos con las apariencias.

Saludos y bendiciones.

Candelero

1 El denario era el pago de un día de trabajo en tiempos del Maestro, es decir, el perfume era muy valioso